Seminario

INFANCIA Y PEDAGOGÍA:RELACIONES DE PODER Y SABER

CLAUDIA XIMENA HERRERA BELTRÁN

Seminario Común Pedagógico 

2015-1 Virtual

Justificación 

La emergencia de la infancia en el siglo XVI supuso la aparición del dispositivo escolar que encerrara a dicho sujeto y le enseñara lo que para la época se consideraría fundamental. Una infancia inventada como necesitada, vivió al interior de los espacios escolares a manos del cuerpo de especialistas, una serie de regulaciones desde lo que se llamó Pedagogía y que apunto inicialmente al disciplinamiento de los sujetos (Naradowski, 1994) a partir de prácticas corporales. Dichas prácticas fueron configurando el sujeto deseado. En este proceso, tanto el cuerpo de especialistas, como el estatuto de infancia y la escuela como lugar de encierro (Varela & Álvarez-Uría, 1994), produjeron poco a poco la extinción de otros modos de educación que se vivían en la época. De otro lado, la dinámica escolar trajo consigo la institucionaización de dicho dispositivo escolarizador propiciando la constitución del sistema educativo que poco a poco homogenizo -o por lo menos eso pretendía- los modos de educar ello se produjo en un movimiento entre imponer y naturalizar, es decir, hacer necesario un tipo de educación un tipo de escolarización. Así la escuela se hizo necesaria (Álvarez Gallego, 1995), se naturalizó como el espacio para ir a aprender

En el periodo etario que se denominó infancia. El ingreso de la infancia a la familia se dio mediante una alianza entre el estado representado por la escuela y la familia en cabeza del padre quien entrego la educación de los hijos a la escuela, lugar que hasta entonces le había correspondió en su totalidad (Narodowski, 1999).

La maquinaria escolar que se echo a andar en el siglo XVI aproximadamente, no ha dejado de transformarse en su singular funcionamiento que al contacto con los otros elementos que viven transformaciones similares, se relacionan para producir nuevos y constantes cambios, como relaciones y tensiones entre ellos mismos. Dichas relaciones se han producido desde saberes diversos como fuerzas en el orden del poder. Un poder marcado por la época en que dicha maquinaria ha tenido lugar. El orden pedagógico en sus inicios se ejerció sobre el cuerpo y mediante ciertas prácticas corporales se buscó producir un tipo de sujeto en tanto ideal civilizador. Entender como esa pedagogía, se fue constituyendo en un saber escolar modelador y productor de subjetividades, que se hizo ciencia disciplina y saber desde culturas pedagógicas surgidas a partir de fuerzas sociales, políticas y culturales que cada momento histórico y que como discursos en cabeza de intelectuales, pedagogos, maestros, políticos y filósofos permeó  las distintas sociedades, es el interés del seminario.